Nadie sabe mucho sobre cuánto tiempo un espacio debe permanecer oculto para adquirir esta propiedad en particular, ni si hay alguna condición especifica. Pero es lejos una ocurrencia mucho más común de lo que crees.
En construcciones nuevas, cuando esto sucede, a menudo los residentes relatan sentir frio cuando las cruzas, incluso en áticos durante el más caliente de los veranos. Dándole una mirada rápida, contemplando un poco para ver si hay algo allí, un temor sobrenatural los invade, y dejan el lugar rápidamente, no exactamente con tranquilidad. Una vez olvidado, la sensación se pierde, y rápidamente es olvidado, o se burlan del hecho.
¿Qué sucede en realidad en estos santuarios olvidados en la oscuridad? Es imposible de decir. Ya que mientras tales esquinas han sido expuestas para revelar absolutamente nada, algunas almas valientes han perdido su salud mental por nada más, que un vistazo inoportuno. Lo más seguro por hacer cuando te encuentras con tal fenómeno es; cerrar los ojos, desgarra la visión del área en un simple movimiento, entonces sujétate a cualquier cosa. No importa lo que escuches o sientas, no te levantes, no mires alrededor, y no intentes cubrir tus oídos. Podrías ser uno de los afortunados.
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